El avance de la histeroscopia ha permitido a los ginecólogos diagnosticar y tratar patologías intrauterinas con mayor precisión y menor invasión. Entre las herramientas más destacadas, el láser de diodo ha demostrado ser una tecnología clave por su seguridad y eficacia. Su mecanismo de acción, basado en la emisión de luz monocromática con longitudes de onda entre 800 y 1470 nm, permite una absorción selectiva en los tejidos, lo que minimiza el daño térmico y mejora la coagulación, reduciendo el sangrado.
A diferencia de la electrocirugía y el láser de CO2, el láser de diodo combina precisión y efecto hemostático, lo que lo hace ideal para procedimientos histeroscópicos. Entre sus principales aplicaciones en histeroscopia se encuentran la miomectomía histeroscópica, la polipectomía y la resolución de tabiques uterinos. Estas intervenciones se benefician de la precisión del láser, que permite preservar la estructura del endometrio y acortar los tiempos de recuperación.
Estudios recientes han demostrado su eficacia con tasas de éxito superiores al 90%. Además, su implementación en el consultorio ha optimizado la accesibilidad a tratamientos mínimamente invasivos, disminuyendo la necesidad de quirófano y reduciendo costos.
El láser de diodo representa un avance significativo en la cirugía ginecológica, ofreciendo una alternativa eficiente y segura para el tratamiento de diversas patologías intrauterinas. Su versatilidad y precisión lo posicionan como una herramienta indispensable en la histeroscopia moderna.
Fuentes:
El contenido de este artículo está basado en el eBook: Exuss Medical, El Láser de Diodo en Histeroscopia: Innovación y Precisión en Cirugía Ginecológica