No por ser la herramienta más antigua del marketing, ha dejado de ser una de las favoritas y más efectivas.
El email marketing sigue más vigente que nunca, sobre todo si tus pacientes tienen un perfil profesional y hoy vamos a compartirte algunas estrategias para que le saques el máximo provecho.
Aporta valor.
Genera confianza, utilízalo para educar a tus pacientes sobre temas de su interés. Si bien no vas a dar diagnóstico o recomendar medicamentos, puedes compartir información general sobre tratamientos, cuidados, prevención, hábitos saludables y cualquier otro tipo de información relevante y de utilidad.
Se lo más específico posible
No a todo mundo le interesa saber sobre todos los temas. Lo mejor es que segmentes bien a tu público y crees textos personalizados de acuerdo a sus necesidades específicas. El uso de una herramienta de marketing automation conectada a un CRM te permitirá realizar acciones más precisas y personalizadas. Una agencia de marketing te puede apoyar en este aspecto.
Venta directa
Una vez tengas a tus pacientes bien segmentados, puedes utilizar el email como medio de venta directa. Las newsletters son fundamentales para la fidelización de clientes en el sector salud. Envíalas periódicamente con lo último sobre tus servicios, promociones, descuentos, cambio de horarios, charlas, etc. Otra opción es realizar estrategias cross-selling o up-selling y conseguir así un mayor número de consultas.
Aumentar conocimiento
El email es un medio perfecto para conocer mejor a tus pacientes y fidelizar con ellos. A través de formularios, encuestas y una depurada estrategia de contenidos afín a sus necesidades. Pero, ojo: querer conocer al paciente no es sinónimo de saturar con mensajes. Eso solo conseguirá fatigarlo y que termines en la bandeja de spam.
Ten discreción
Es probable que debas crear una base de datos para un mejor seguimiento y atención de tus pacientes vía email. Ante todo, trata toda la información personal con especial cuidado y discreción. En su mayoría, se trata de datos sensibles que por razones éticas y legales no pueden quedar expuestos al público. Protege con recelo las bases de datos y te ganarás la confianza de tus pacientes.
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