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La histeroscopia diagnóstica

La histeroscopia diagnóstica

En ginecología no todo se encuentra a simple vista ni se puede obtener a través de exploraciones externas como el examen físico, la ecografía o la radiología.

Afortunadamente, para esos casos en los que se debe ir más profundo existe la histeroscopia, un procedimiento que permite la visualización directa del canal cervical y de la cavidad uterina.

Usos de la histeroscopia diagnóstica

En la actualidad, la histeroscopia diagnóstica sirve para estudiar el endometrio, morfológica y funcionalmente. Permite diagnosticar y tratar gran parte de la patología uterina intracavitaria mediante la introducción de una lente (histeroscopio) por el cuello del útero.

A la lente se le adapta una cámara que se conecta a una pantalla de video, asegurando el máximo rendimiento y fiabilidad en la interpretación de las imágenes y minimizando, a su vez, el riesgo de complicaciones.

Cuando la misma técnica se utiliza para tomar muestras, resecar formaciones endometriales o intervenir, se denomina histeroscopia quirúrgica.

La histeroscopia diagnóstica se encuentra indicada para mujeres con alteraciones menstruales (reglas abundantes o pérdidas entre menstruaciones), problemas de esterilidad o infertilidad, localización de cuerpos extraños o restos placentarios y alteraciones morfológicas de la cavidad uterina (pólipos, miomas, hiperplasia).

La Histeroscopia diagnóstica se utiliza en la detección de pólipos, miomas o fibromas intrauterinos, malformaciones uterinas (como el útero septo o tabicado), la hipertrofia o crecimiento exagerado del endometrio.

También se aplica cuando otros exámenes, como la ecografía ginecológica, la citología o la biopsia de endometrio, orientan hacia una patología en esa localización.

Una de sus grandes ventajas es que permite la toma de biopsias dirigidas para el estudio microscópico de la zona más representativa de la mucosa endometrial.

La histeroscopia diagnóstica no requiere de preparación especial alguna. Se realiza en consulta de forma ambulatoria, sin necesidad de anestesia ni preparación adicional alguna y su duración media es de 2 a 5 minutos.

Debe practicarse siempre fuera de la menstruación. La histeroscopia es un procedimiento muy seguro y las complicaciones graves son raras.

Contraindicaciones

No se recomienda para las mujeres con cáncer de cuello uterino, enfermedad inflamatoria pélvica, o en estado de embarazo, ya que puede ser perjudicial para el feto.

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