En la búsqueda continua por comprender y abordar las complejidades de la salud sexual femenina, hay herramientas que facilitan la tarea.
Una de las principales es el Índice de Salud Sexual Femenina (FSFI por sus siglas en inglés), diseñado para evaluar diversos aspectos de la función sexual femenina.
Creado en el International Consensus Development Conference on Female Sexual Dysfunctions, el FSFI es un cuestionario estructurado y estandarizado para medir la función sexual en mujeres adultas.
Objetivo y sencillo de aplicar, contiene propiedades psicométricas adecuadas que permiten evaluar la sexualidad en diferentes etapas de la vida.
Normalmente utilizado para estudios epidemiológicos y clínicos, consta de nueve preguntas divididas en seis dominios que involucran toda la esfera sexual: deseo, excitación, lubricación, orgasmo, satisfacción y dolor.
Entre sus principales ventajas se encuentran que es autoadministrado, simple y fiable para valorar la función sexual femenina en un amplio rango de edad.
Al abarcar tanto la dimensión física como la psicológica de la salud sexual femenina, permite un análisis integral y completo.
Por ende, su aplicación no se limita únicamente a la detección y diagnóstico, sino que también es una herramienta eficaz para monitorear la efectividad de tratamientos y terapias en pacientes.
En general sirve bien con fines investigativos o de detección de algún problema específico, facilitando la identificación de patrones y tendencias en la función sexual femenina, así como propiciando un mejor entendimiento de la salud sexual de las mujeres.
Lo malo es que no valora bien la autosexualidad ni las personas sin pareja sexual.
En el campo de la ginecología, el FSFI ha demostrado ser invaluable para investigar y comprender una amplia gama de condiciones relacionadas con la salud sexual femenina.
Desde la evaluación de trastornos del deseo sexual hipoactivo hasta el análisis de factores psicológicos que pueden afectar la función sexual.
Su diseño meticuloso, enfoque y subescalas la posicionan como una herramienta de inestimable para evaluar aspectos de la salud sexual femenina y mejorar la calidad de la atención médica.
Desde hace varios años, el FSFI brinda una base sólida para la investigación rigurosa y la generación de conocimiento o evidencia científica.
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Fuente:
Sánchez, F. (2004, 15 octubre). Diseño y validación del Cuestionario de Función Sexual de la Mujer (FSM). Atención Primaria. https://www.elsevier.es/es-revista-atencion-primaria-27-articulo-diseno-validacion-del-cuestionario-funcion-13067028
M, J. E. B., E, L. B., A, P. C., Carrasco, A., V., L, H. I., & C, S. S. (2004). ÍNDICE DE FUNCIÓN SEXUAL FEMENINA: UN TEST PARA EVALUAR LA SEXUALIDAD DE LA MUJER. Revista chilena de obstetricia y ginecología, 69(2). https://doi.org/10.4067/s0717-75262004000200006
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